Descubre las claves de como corregir a un perro agresivo a través de un entrenamiento efectivo. En esta guía, encontrarás estrategias probadas y consejos prácticos para abordar y corregir la agresividad en perros.
Descubriremos como distinguir a los perros agresivos y porque motivo lo son.
Cuando termines de leer este artículo, entenderás muchas cosas sobre los perros agresivos y podrás tener una perspectiva más clara de como atajar el problema.
¿Como saber si mi perro es agresivo?
Para identificar a un perro agresivo es necesario observarle y entender sus comportamientos, ya que ciertas actitudes pueden ser puntuales y conducir al error. No siempre que un perro ladra de forma enérgica, es por que sea agresivo.
Hay determinadas señales que podrían distinguir a un perro agresivo de otro que no lo es.
Antes de saber como corregir a un perro agresivo, vamos a descubrir las características que los definen.
CARACTERISTICAS EN COMÚN DE LOS PERROS AGRESIVOS:
Postura corporal:
Un perro agresivo a menudo adoptará una postura rígida y tensa. Puede mantener la cabeza baja, mostrar los dientes y erizar el pelaje. También puede tener las orejas hacia atrás o hacia adelante de manera amenazante.
Gruñidos o ladridos amenazantes:
Los gruñidos profundos, los ladridos agudos y persistentes, o cualquier vocalización que suene amenazante pueden indicar agresión en un perro.
Mostrar los dientes:
Cuando un perro muestra los dientes sin motivo aparente o en respuesta a estímulos mínimos, puede ser un signo de agresión.
Posturas defensivas:
Un perro agresivo puede adoptar posturas defensivas, como encogerse o retroceder, mientras gruñe o ladra en situaciones que percibe como amenazantes.
Intentos de ataque:
Un perro agresivo puede intentar atacar, ya sea mostrando una clara intención de morder, lanzándose hacia adelante o exhibiendo un comportamiento de embestida.
Historial de comportamiento agresivo:
Si el perro ha demostrado comportamientos agresivos en el pasado, como morder, gruñir o mostrar otras formas de agresión, esto puede ser un indicador de que es propenso a la agresión.
¿Por qué mi perro es agresivo?
La agresividad en los perros puede manifestarse de diversas formas y tener diferentes causas subyacentes. Es crucial comprender qué está provocando este comportamiento para abordarlo adecuadamente y garantizar la seguridad y el bienestar tanto del animal como de las personas que lo rodean.
Factores genéticos y de crianza:
Algunas razas tienen predisposición genética a la agresividad, pero también la forma en que un perro es criado y socializado desde cachorro puede influir en su comportamiento.
Miedo y ansiedad:
Los perros pueden volverse agresivos como resultado del miedo o la ansiedad. Situaciones estresantes, traumas pasados o una falta de socialización adecuada pueden desencadenar este tipo de comportamiento.
Territorialidad y protección:
Los perros pueden mostrar agresividad cuando se sienten amenazados o perciben que están protegiendo su territorio, a su familia o a ellos mismos.
Dolor o enfermedad:
El dolor físico o problemas de salud subyacentes pueden hacer que un perro se vuelva agresivo como una forma de protegerse a sí mismo o evitar el contacto físico que cause más dolor.
Falta de entrenamiento o liderazgo:
La falta de una estructura clara y de liderazgo por parte de los dueños puede llevar a que un perro adopte un comportamiento dominante o agresivo.
Mi perro es agresivo con otros perros ¿Por qué?
¿Como corregir a un perro agresivo con otros perros?
Es importante identificar la causa subyacente de porque tu perro es agresivo con otros perros, para poder abordarla de manera efectiva y ayudar a tu mascota a llevar una vida feliz y saludable. Identificar la causa es uno de los primeros puntos para entender como corregir a un perro agresivo.
Falta de socialización temprana:
Los perros que no fueron expuestos adecuadamente a otros perros durante su etapa de socialización pueden desarrollar miedo o inseguridad hacia ellos, esto se puede manifestar en forma de agresión.
Socializar al perro con otros perros desde temprana edad es imprescindible ya que al interactuar con ellos desde muy joven, crecerá viéndolo como algo normal.
Este es el paso más básico de todos en la relación de un perro con los demás. Un perro bien socializado con otros perros desde muy joven, al menos desde los 3 meses de edad, nunca verá a otro perro como enemigo, a menos otros factores estén influyendo.
Es bueno recalcar, que la socialización de un perro no debe de ser solo en su juventud, el perro debe de socializarse con otros, durante toda su vida. Este será uno de los aspectos claves en su desarrollo y su equilibrio.
Experiencias traumáticas pasadas:
Los perros que han tenido experiencias negativas, como peleas con otros perros o haber sido atacados, pueden desarrollar comportamientos agresivos como una forma de protegerse a sí mismos.
Inseguridad o dominancia:
Algunos perros pueden mostrar agresión hacia otros perros debido a sentimientos de inseguridad o para establecer su dominancia en la jerarquía social canina.
Problemas de salud:
A veces, la agresión hacia otros perros puede ser causada por problemas de salud subyacentes, como dolor crónico o enfermedades que afectan el sistema nervioso.
Conductas aprendidas:
Si un perro ha sido recompensado o no corregido por comportamientos agresivos hacia otros perros en el pasado, es más probable que continúe mostrando esa conducta en el futuro.
Instinto de presa:
Algunos perros tienen un fuerte instinto de presa que los lleva a perseguir o atacar a otros animales, incluidos los perros, especialmente si no han sido entrenados adecuadamente para controlar este comportamiento.
Territorialidad:
Los perros pueden volverse agresivos hacia otros perros cuando se sienten amenazados o ven invadido su territorio, como su hogar o su espacio personal.
A excepción de los problemas de salud que pueden requerir atención medica, el resto de factores que hacen que un perro sea agresivo con otros perros, se puede corregir con el adiestramiento.
Mi perro es agresivo con las personas ¿Por que?
¿Como corregir a un perro agresivo con las personas?
Prácticamente existe un solo motivo por el cual un perro puede ser agresivo con las personas y es la falta de socialización temprana. Podemos discutir otras causas, pero la mayor parte de ellas nos llevarían al mismo punto, una mala socialización con las personas desde los primeros meses de vida.
Los perros que no han sido adecuadamente socializados durante su etapa de cachorros pueden desarrollar miedo o desconfianza hacia las personas.
La falta de exposición positiva a diferentes personas, entornos y situaciones puede afectar al perro de manera muy negativa.
La socialización continua y la exposición gradual a diferentes personas y ambientes pueden ayudar a reducir la agresión por miedo hacia las personas.
Es importante trabajar en el adiestramiento para desarrollar un plan de socialización adecuado para este tipo de perros, este plan debe de incluir técnicas de desensibilización y contra planificación.
Además, se deben evitar las situaciones que puedan desencadenar la agresión y proporcionar un ambiente seguro y tranquilo para el perro.
Con un buen programa de adiestramiento canino esta conducta se puede revertir por completo.
Como corregir a un perro agresivo. 6 Puntos clave
- Entrenamiento de obediencia básica: Comienza con el entrenamiento de obediencia básica para establecer una comunicación clara y fortalecer tu vínculo con tu perro. Enseña comandos simples como «sentarse», «quedarse» y «venir». Practica estos comandos regularmente en diferentes entornos y situaciones.
- Desensibilización a los desencadenantes: Identifica los desencadenantes que provocan la agresión en tu perro, como otros perros, personas desconocidas o ciertos objetos. Luego, trabaja en exponer gradualmente a tu perro a estos desencadenantes a una distancia segura y controlada, mientras lo mantienes relajado y recompensas su calma con golosinas y elogios.
- Contracondicionamiento: Asocia los desencadenantes de la agresión con experiencias positivas para cambiar la respuesta emocional de tu perro. Por ejemplo, cuando vea a otro perro, inmediatamente comienza a darle golosinas y elogios, para que aprenda a asociar la presencia de otros perros con cosas buenas.
- Juegos de interacción y estimulación mental: Proporciona a tu perro suficiente ejercicio físico y mental para ayudarlo a liberar energía y reducir el estrés. Juegos interactivos como buscar, juegos de olfato y rompecabezas de alimentación son excelentes formas de mantener a tu perro ocupado y centrado en actividades positivas.
- Entrenamiento de «déjalo»: Enseña a tu perro el comando «déjarlo» para que aprenda a soltar objetos o dejar de prestar atención a estímulos que lo exciten o lo pongan ansioso. Esto puede ser útil para redirigir su atención y prevenir situaciones potencialmente conflictivas.
- Establecimiento de rutinas y límites: Mantén rutinas consistentes y establece límites claros para ayudar a tu perro a sentirse seguro y cómodo en su entorno. Esto puede incluir horarios regulares de alimentación, paseos y tiempo de juego, así como reglas sobre dónde puede y no puede ir en la casa.
Cachorros agresivos
El cachorro pasa por diferentes etapas durante su desarrollo, una de ellas podría ser mostrar agresividad.
Los cachorros están expuestos a cambios continuos debido a que son esponjas que absorben todo lo que acontece a su alrededor.
Para un cachorro no es fácil gestionar lo que está bien y lo que está mal y somos nosotros los que debemos de estar a su lado para guiarle por el buen camino. La forma en la que le eduquemos hoy, definirá su personalidad y su carácter en el futuro.
A continuación, daremos varias pautas a tener en cuenta para no tener un cachorro agresivo.
Agresividad por sobreprotección en cachorros
Sobreproteger a un cachorro es un arma letal contra él, ¡nunca lo hagas!
Cuando sobreproteges a un cachorro le das la herramienta para que sea inseguro y extremadamente dependiente. Ambas cosas, la inseguridad y la dependencia, son motivos para tener un perro agresivo en el futuro.
El cuadro que se repite una y otra vez es el siguiente:
Sobreprotección=inseguridad y dependencia= miedo= agresividad y/o mala conducta en general.
Deja que tu perro se relacione de una manera natural, evita sobreprotegerle.
DOS EJEMPLOS PARA DEJAR ATRAS LA SOBREPROTECCIÓN EN EL CACHORRO:
Ejemplo 1: Estás en un parque con tu cachorro y ves a un perro grande acercándose, coges a tu cachorro en brazos. El dueño del perro te dice que es muy dócil y le gusta mucho interactuar con todos los perros. Permite entonces que tu cachorro se relacione de una forma normal con este perro, no importa que sea grande, debe de vivir todo tipo de experiencias con perros de todos los tamaños, todas las razas y de cualquier edad.
La primera reacción es de protección y no está mal, pero si no permites que tu perro se relacione con el otro porque insistes en tu miedo, a pesar de que ya te han dicho que es un perro muy dócil, entonces sería sobreprotección.
Ejemplo 2: Se acercan varios niños y quieren coger a tu cachorro en brazos, pero tienes miedo de que se les pueda caer. Permíteles jugar con tu cachorro a nivel del suelo, tu pequeño se sentirá feliz jugando con estos niños. No le sobreprotejas pensando que le van a hacer daño, porque el mayor daño se lo estarás haciendo tú con tu actitud.
Si de verdad quieres lo mejor para tu cachorro, permítele vivir todo tipo de experiencias.
La socialización continuada:
Una y otra vez, expón a tu perro a la interacción con todo tipo de personas y en todo tipo de situaciones y lugares, haz lo mismo con todo tipo de perros y otros animales, todos ellos forman parte del ambiente al que se enfrentará a lo largo de su vida por lo que la socialización ha de hacerse muy bien y a partir de una edad muy temprana, no mas tarde de los 3 meses.
Si lo piensas bien, hacer esto es una tarea muy fácil que no requiere ningún tipo de esfuerzo, y su recompensa es muy grande.
El entrenamiento básico:
El entrenamiento básico es esencial para enseñar a tu cachorro a comportarse de manera adecuada y evitar comportamientos agresivos en el futuro. Esto incluye enseñarle órdenes básicas como “sentarse”, “quedarse quieto” y “venir cuando se le llama”.
Cuando el cachorro entiende las ordenes básicas y las ejecuta, se establece una comunicación clara entre el perro y su dueño, reduciendo la confusión y la frustración, algo que puede disminuir la probabilidad de comportamientos agresivos.
Aprender a sentarse o quedarse quieto en situaciones específicas enseña al cachorro a controlar sus impulsos y emociones. Esto es crucial para evitar reacciones agresivas ante estímulos que puedan generar ansiedad o excitación, como la presencia de otros perros o personas.
Un cachorro que aprende a obedecer órdenes básicas, desarrolla un mayor respeto hacia su dueño como líder y figura de autoridad. Este respeto mutuo es fundamental para establecer una relación saludable y evitar comportamientos desafiantes o agresivos.
Enseñar órdenes básicas a un cachorro no solo facilita la convivencia y el entrenamiento diario, si no que también sienta las bases para un comportamiento equilibrado y no agresivo en el futuro, al promover la comunicación efectiva, el autocontrol y el respeto mutuo.
El refuerzo positivo:
Recompensa a tu perro por comportarse de manera tranquila y amigable durante las interacciones sociales. Usa principalmente elogios, caricias o juegos, pero podrías darle premios también, aunque no se trata de dar mil premios a lo largo del día, el perro se estimula más con el cariño, el afecto, unas caricias etc..
Cuando refuerzas los comportamientos deseados fomentas una actitud positiva hacia las personas y otros animales lo que se traducirá en agresividad cero en el cachorro.
Como educar a un cachorro agresivo
Cuando un cachorro muestra signos de agresión, es natural sentirse preocupado y desconcertado sobre cómo abordar esta situación.
La agresión en los cachorros puede manifestarse de diferentes maneras y puede ser causada por una variedad de factores, como miedo, ansiedad, territorialidad o falta de socialización. En tales casos, es importante tomar medidas proactivas para abordar el problema antes de que vaya a más.
Los cachorrros aprenden muy rápido, tanto para lo bueno como para lo malo, por eso, las actitudes negativas como los comportamientos agresivos hay que atajarlos cuanto antes.
La parte buena es, que al ser un cachorro, aun no ha tenido mucho tiempo para afianzar su mala conducta y esta actitud, puede modificarse en un espacio corto de tiempo si se actúa rápido.
Identifica las causas de su agresividad:
Observa cuidadosamente las situaciones en las que tu cachorro muestra agresión y trata de identificar las causas subyacentes. Puede ser miedo, ansiedad, territorialidad, frustración u otras razones.
Comprender qué desencadena la agresión es fundamental para abordar el problema de manera efectiva.
Evita provocaciones:
Evita exponer a tu cachorro a situaciones que desencadenen su agresión mientras trabajas en su educación. Esto puede incluir evitar el contacto con otros perros o personas hasta que hayas implementado estrategias de manejo y entrenamiento adecuadas.
Consulta a un profesional, busca la ayuda de un adiestrador canino o un especialista en comportamiento animal. Estos profesionales te ayudarán a identificar el origen subyacente de la agresión y siempre van a tener un plan de manejo y entrenamiento para cada causa.
Implementa técnicas de modificación de conducta:
Una vez que hayas identificado las causas de la agresión, trabaja con el profesional para implementar técnicas de modificación de conducta adecuadas. Esto puede incluir el uso de refuerzo positivo, desensibilización y contracondicionamiento para cambiar la respuesta emocional de tu cachorro a situaciones específicas.
Establece límites claros:
Es importante establecer límites claros y consistentes con tu cachorro para prevenir comportamientos agresivos. Esto incluye establecer reglas de casa coherentes, proporcionar estructura y rutina, y evitar reforzar inadvertidamente comportamientos no deseados.
Proporciona ejercicio y estimulación mental:
Asegúrate de que tu cachorro esté recibiendo suficiente ejercicio físico y estimulación mental para liberar energía y reducir el estrés. El aburrimiento y la falta de ejercicio pueden contribuir a comportamientos agresivos.
Ten paciencia y perseverancia:
La educación de un cachorro agresivo puede llevar tiempo y requiere paciencia y perseverancia por parte del dueño.
Mantén la calma, sé consistente en tu enfoque y celebra los pequeños avances a lo largo del proceso de entrenamiento
