Como Educar a un Cachorro Para ir al Baño.

La Guía Completa Para un Éxito Garantizado

Aprender como educar a un cachorro para ir al baño en el momento y lugar adecuados es fundamental para establecer una convivencia armoniosa y duradera y prevenir problemas de comportamiento en el futuro.

La gestión de la higiene en el hogar es una de las principales preocupaciones para los dueños de mascotas, ya que esto, que puede afectar significativamente en la calidad de vida de la familia y del propio cachorro.

Para abordar esta importante tarea, es crucial comprender los principios básicos del entrenamiento de la micción y la defecación. Esto implica conocer los patrones de eliminación típicos de los cachorros, así como identificar las señales que indican que necesitan ir al baño. 

Además, es fundamental establecer una rutina consistente y proporcionar refuerzos positivos para reforzar el comportamiento deseado.

Algunos cachorros pueden aprender rápidamente, mientras que otros pueden requerir más tiempo y paciencia. La clave está en ser paciente, consistente y comprensivo durante todo el proceso de entrenamiento.

En esta guía práctica para educar a tu cachorro a ir al baño, aprenderás todo lo necesario para saber comoentrenarlo.

Si lees todo el artículo y lo aplicas, eligiendo el sistema 1 o 2 que mas se adapte a tus horarios, el éxito está garantizado.

Aunque en este artículo hablaremos también del sistema 3, no te lo vamos a aconsejar nunca, ya que este método es el principal causante de que tantos dueños tengan problemas con sus cachorros a la hora de hacer sus necesidades en el lugar preciso.

3 FORMAS DE EDUCAR A UN CACHORRO PARA IR AL BAÑO

A continuación te presentamos 3 técnicas diferentes para enseñar a tu cachorro a ir al baño. Abordaremos cada opción con detenimiento, destacando los desafíos involucrados, el tiempo requerido y las claves para el éxito. Pondremos una nota a cada uno de los 3 métodos y el porcentaje de dificultad para que tu cachorro consiga el objetivo.

1. Educar con Jaula o Transportín.
2. Educar con Corral o Parquecito
3. Método Tradicional
4. Combinación de Métodos

No te pierdas esta guía completa, trata de seguirla tal y como te la explicamos, y garantízate el éxito. Tu cachorro va a adquirir esta habilidad de manera definitiva. ¡Te sorprenderán los resultados

1- Como Educar a un Cachorro para ir al Baño con Jaula o Transportín.

–Nivel de dificultad para el cachorro: Bajo

–Porcentaje de dificultad 0/100: 10%  

–Nota media: 9

–Dedicación por parte del propietario: Muy alta

No te preocupes, las jaulas no serán perjudiciales para ningún cachorro si le damos el uso adecuado y precisamente, eso es lo que vamos a hacer.

No solo no vas a maltratar a tu cachorro en el proceso de corregirle, si no que aprenderá a ser más equilibrado y sentarás las bases para un adiestramiento posterior. Además, este sistema bien aplicado, te forzará a pasar mas tiempo con el, algo que agradecerá enormemente,

Para que te hagas una idea, la jaula o el transportín lo vamos a usar de un modo similar a como se usa una cuna para un bebe en las horas de la noche y un parquecito de juegos en las horas del día, los bebes suelen pasar muchos momentos del día en estos lugares sin que por ello les estemos maltratando.

Los perros son animales de madriguera y siempre buscarán una pequeña cueva o un un rincón para su seguridad, ya sea que se lo proporcionemos o no. Esto hace que sea relativamente fácil entrenar a nuestro cachorro para que ame su jaula, convirtiéndola en un refugio seguro y cómodo.

Los perros son criaturas muy limpias y prefieren evitar ensuciar su entorno. Por lo tanto, es crucial que la jaula sea del tamaño adecuado: lo suficientemente grande como para que el cachorro se acueste, se levante y pueda dar la vuelta por completo, pero que no sea tan grande como para permitir que el cachorro pueda usar un rincón de la jaula como baño y acostarse en el otro lado.

Es crucial reforzar la idea de que la jaula o el transportín son un espacio limpio y cómodo, y que salir de ellos es la oportunidad para hacer sus necesidades en un lugar adecuado. 

Los cachorros aprenden rápido, por que saben lo que pretendemos, entienden lo que decimos y la forma como se lo decimos (Estudio realizado por el investigador ATTILA ANDICS, New York Times)

Pasos previos al entrenamiento con jaula o transportín

Es crucial que los cachorros entiendan que la jaula o el transportín va a ser un lugar agradable en el que se van a sentir cómodos y protegidos. Por esta razón, vamos a ir adaptando al cachorro poco a poco, aquí te explicamos como hacerlo correctamente.

1- El lugar adecuado:

Antes de comenzar el entrenamiento con jaula para que tu cachorro vaya al baño, es importante seleccionar  el lugar adecuado para colocarla. Este lugar debe ser tranquilo, seguro y accesible para tu cachorro. Piensa donde se va a sentir mejor, tal vez un sitio donde pueda verte por más tiempo, piensa en todo aquello que beneficie al cachorro antes de tomar la decisión.

2- Preséntale la jaula o el transportín:

Los primeros dos o tres días, haz que la jaula sea un objeto mas de la casa con el que familiarizarse. Puedes jugar con tu cachorro cerca de la jaula sin intención de que entre, solo para que la vaya asociando. No tengas prisa en este proceso.

3- Aprendiendo a entrar y a salir

Coloca dentro un colchón, una cama o una manta, si es algo que ya conoce mejor y esperemos a que entre por si solo.

Pon algún premio dentro de la jaula, uno que le guste especialmente y juega cerca de de ella para que le huela, pero no le animes a entrar, deja que el solo lo descubra y lo haga. Si pasados unos minutos no entra por si solo, repítelo mas tarde o al día siguiente.

Es importante que el marque el ritmo, que se sienta cómodo entrando, sin obligarle. 

No te desanimes ni te desesperes, porque no tardarás en conseguirlo.

Estas pequeñas clases de entrenamiento serán vitales para la convivencia. Te llenarás de alegría y entusiasmo a medida en que tu pequeño progrese.

Lánzale algún premio al interior para que aprenda a entrar y una vez dentro, cuando haya investigado el lugar, llámale para que salga, o bien juega con una pelota incitándole a salir. Que aprenda a entrar y salir por si mismo, sin ninguna ayuda, con toda la naturalidad.

No importa que esto te lleve dos o tres días, todo el tiempo que dediques ahora, será infinitamente menor a los resultados que lograras.  ¿Quien no cambiaría unos pocos días por 14 o 15 años de educación?

Haz simplemente, que tu cachorro se divierta, que todo esto sea como un juego para el.

4- Estancia con recompensa

Una vez que tu cachorro entre, ofrécele algún premio o recompensa por hacerlo, entrégaselo en el interior de la jaula. Ten preparado algún juguete o peluche dentro, si es algo que le gusta y reconoce mejor.

No le des mayor importancia al proceso, deja que de forma natural el decida quedarse dentro o salir.  Haz esto con la puerta abierta, que entre y salga cuando quiera.

5- Intervalos cortos en el interior

Poco a poco tu cachorro permanecerá mas tiempo en el interior, prémiale estando dentro, haz que su estancia dentro sea reconfortante para el, que lo asocie con cosas positivas: un lugar excelente para descansar, con una cama muy agradable, con juguetes, con premios, todo es positivo en su interior. No hay motivo para no permanecer mas tiempo dentro.

6- Intervalos mas largos en el interior – Cerrando la puerta.

Cuando tu cachorro esté habituado, se sienta cómodo, y veas que pasa ratos mas largos en su interior, es hora de ir cerrando la puerta. En un principio no tengas en cuenta los horarios, los primeros días son de prueba. Puede estar dentro con la puerta cerrada por momentos cortos.

7 – ¡Adaptación perfecta!

Cuando veas a tu cachorro perfectamente adaptado a la jaula o el transportín, comienza a aplicar los horarios que verás en las tablas de tiempos, en este mismo artículo. Sigue premiando su estancia en el interior, no olvides llevarle de vez en cuando una pequeña recompensa.

8- Tiempo suficiente con la puerta cerrada

Tu cachorro está en la fase de entrenamiento con la puerta cerrada y según la tabla de tiempos.

Aunque con este sistema, la mayor parte de los cachorros van a prender en una o dos semanas, considera llevar a cabo este procedimiento durante al menos 1 mes. No debes tener prisa, se trata de que tu cachorro aprenda a ir al baño para toda su vida.

Recuerda, que si tu cachorro tiene un mal habito ya adquirido y por mucho tiempo, especialmente en cachorro de más de 5 meses, este proceso puede costar un poco más, pero de igual modo, con tu paciencia y perseverancia, lo aprenderán.

9- Abrir la puerta definitivamente

Has hecho todo correcto, ha pasado el tiempo suficiente y tu cachorro ya ha aprendido. Abre poco a poco la puerta, no se trata de que hayan pasado 30 días exactos y le abras ya, si no que lo hagas de una manera gradual, y por fin, la puerta la abrirás para siempre.

Manejando los tiempos: Dentro y fuera de la jaula o el transportín

Es esencial gestionar los horarios tanto dentro como fuera de la jaula o el transportín de tu cachorro.

Los tiempos varían según la edad del cachorro; un cachorro de 2 meses tiene una capacidad de retención diferente a uno de 5 meses. A medida que crece, pasará más tiempo dentro de la jaula o transportín y más tiempo fuera. 

El proceso mínimo de aprendizaje es de 1 mes. Aunque este tiempo en la mayoría de los casos es menor, sugerimos un mínimo de 1 mes, incluso si el cachorro parece haber aprendido, ya que se necesita tiempo para madurar la idea y evitar retrocesos.

En cachorros de edad superior a 5 meses o perros adultos, si ya tienen una mala educación al respecto, este proceso puede durar 2 meses o más, ya que se trata de restablecer algo que para ellos está normalizado.

Durante la noche los cachorros duermen, por lo que podrá estar más tiempo dentro de la jaula o el transportín. ¡Ojo! siempre que puedas vigilarlo.

MUY IMPORTANTE! 

Debes usar las jaulas y transportines con responsabilidad. No puedes excederte en los tiempos. Si no lo puedes hacer bien, no optes por este sistema de entrenamiento.

Puedes usar el sistema 2 de entrenamiento con corral,  o bien una mezcla de ambos, como veras  a continuación en las tablas de tiempos.

Tablas de tiempos durante el periodo de aprendizaje para ir al baño

Entrenamiento con Jaula/Transportín

MESES	Tiempo en la jaula	Tiempo en el exterior	Horario nocturno dormir (Jaula)
2-3 Meses	2 horas	1 hora	3 horas – con vigilancia nocturna
4-5 Meses	3 horas	1 h 20 min	4 horas – con vigilancia nocturna
6-7 Meses	4 horas	1 h 40 min	5 horas – con vigilancia nocturna
8 Meses o más	5 horas	2 horas	6 horas – con vigilancia nocturna

Alternativa: Entrenamiento con jaula o trasnportín de día y corral o parquecito de noche

MESES	Tiempo en la jaula	Tiempo en el exterior	Horario nocturno dormir (Jaula)
2-3 Meses	2 horas	1 hora	8 horas – corral
4-5 Meses	3 horas	1 h 20 min	8 horas – corral
6-7 Meses	4 horas	1 h 40 min	8 horas – corral
8 Meses o más	5 horas	2 horas	8 horas – corral

Puedes alternar el entrenamiento con jaula o transportín con el uso del corral o parquecito. Por ejemplo, cuando tengas que ausentarte, o en las horas de la noche si no vas a estar pendiente del cachorro. 

No recomendamos que dejes al cachorro por la casa durante el periodo de entrenamiento en jaula  ya que pasará de tener poco espacio a tener todo el espacio y es muy probable que se produzca un retroceso.

Si no puedes estar con el, opta por el corral o parquecito para perros ya que es una forma de mantener reducido el espacio durante el periodo de aprendizaje.

Recuerda que para que el cachorro aprenda lo antes posible, hay que limitar o reducir los espacios, a menor espacio, mas fácil aprenderá y en menos tiempo lo vamos a conseguir. 

Que hacer los tiempos que el cachorro está fuera de la jaula

Una vez que el cachorro cumple el horario de estancia en la jaula o transportín y es hora de salir, empieza tu trabajo.

Primeramente, tienes que llevarle al empapador, papel de periódico, bandeja, o cualquier herramienta que vayas a usar. Pero no le lleves tú, deja que el te siga hasta el lugar indicado. Procura que ese lugar vaya ser el definitivo, para que tu cachorro lo asocie para siempre.

Los primeros días, si el área en la que se encuentra el empapador es muy amplia, intenta reducirla o cercarla lo máximo posible, esto es importante ya que es muy posible que tu cachorro, al ver un espacio amplio, quiera investigarlo todo y tendrás muchos problemas para retenerlo junto al empapador.

Poco a poco tu cachorro, a medida que vaya entendiendo lo que pretendes de el, se centrará mas en el empapador y no necesitaras ninguna barrera.

Al inicio de este proceso, es muy probable que el cachorro no haga sus necesidades inmediatamente, sin embargo, a medida que vaya comprendiendo el proceso, este tiempo se reducirá. 

No juegues con el, no le premies, no hagas nada hasta que no haga sus necesidades, solo permanece de pie, expectante, por si falla y tienes que corregirle. 

El motivo de no interactuar con tu cachorro cuando recién le has llevado al empapador, es que aprenda lo que esperas de el. Si te pones a jugar con tu cachorro, o a premiarle antes de que haga sus necesidades, no tendrá ningún sentido que lo hagas después.

Justo en el momento en que tu cachorro haga sus necesidades en el lugar indicado, dale un pequeño premio apetitoso, algo que le guste de verdad, hazlo inmediatamente a su acción de orinar o defecar, antes de que vaya a salir del empapador, papel o lo que uses, solo así y a través de la repetición, asociará el premio con la acción deseada y aprenderá.

Y ahora a jugar!

El cachorro comprenderá en poco tiempo los 4 pasos:

Hacer las necesidades  recibir el premio  jugar  descansar de nuevo en su jaula.  Este ciclo se repetirá una y otra vez.

Cumplir los tiempos es esencial, el cachorro debe estar el tiempo suficiente fuera de la jaula, según lo descrito en las tablas, para desear volver a su pequeña guarida a descansar. Para ello organizaremos el plan de juego con tu cachorro en el siguiente apartado.

Además, los tiempos (dentro-fuera) están coordinados de forma que el cachorro tenga ganas de ir al baño cuando le sacas.

Lo entenderás bien en el siguiente esquema:

Coordinación de los tiempos (dentro-fuera de la jaula) para ir al baño

En el siguiente esquema se refleja el tiempo que tarda un cachorro en ir al baño.

En el ejemplo, un cachorro de dos meses tardaría 2 horas y 45 minutos entre una ida al baño y otra, considerando que hace sus necesidades 15 minutos después de salir de la jaula. Este tiempo puede variar dependiendo de cuánto tarde el cachorro en hacer sus necesidades desde que le sacas.

A mayor edad, mas tiempo permanecerá en el interior y mas tiempo en el exterior de la jaula, por lo que los tiempos entre una y otra vez para ir al baño, aumentarán. Esto se debe a que, con la edad, el cachorro desarrolla un mayor control de sus esfínteres, como parte natural de su maduración y aprendizaje sobre el control de la micción y la defecación.

Ejemplo de coordinación de tiempos (dentro-fuera de la jaula) en un cachorro de 2 meses

2 MESES DE EDAD
2 horas en el interior de la jaula
Ejemplo:10:00h a 12:00h
1 hora en el exterior de la jaula
12:00h a 13:00h
Ejemplo: 12:15 hace sus necesidadaes
Contamos el tiempo que falta hasta la hora de volver al interior de la jaula
12:15h hasta las 13:00h = 0:45min
Nuevo tiempo en el interior de la jaula de 13:00h a 15:00h
2 horas en interior de la jaula + 0:45min desde que tu cachorro fue al baño
Tu cachorro habrá estado 2 horas y 45 minutos sin ir al baño

Como jugar con tu cachorro cuando está fuera de la jaula o el transportín

Lo ideal siempre que juguemos con nuestro cachorro es seguir las siguientes pautas:

1- Juegos de baja intensidad: Reconocimiento, interactuar con las manos. Es importante que el cachorro no te muerda las manos durante estos juegos, algo que suelen hacer muy a menudo. Para corregir esto, puedes visitar nuestro artículo: ¿POR QUÉ MI CACHORRO ME MUERDE?

2- Juegos de media intensidad: Sujetar un hueso y que lo muerda, peluches, juguetes interactivos

3- Juegos de alta intensidad: Tirar de una cuerda, jugar a la pelota, correr.

4- Juegos de media intensidad: Volvemos a los juegos de media intensidad

5- Juegos de baja intensidad: Interactuar de nuevo con las manos sin dejarse morder

6- Baja intensidad: Relajación, masajes, caricias. Preparando al cachorro para ir a descansar.

A través del juego, el cachorro refuerza el vínculo con su dueño, algo que es fundamental para poder educarlo. 

Además, conseguimos que el cachorro ame su jaula, ya que después del juego, deseará un lugar cómodo y tranquilo en el que descansar. 

Una vez de vuelta a la jaula o el transportín, estando dentro, dale el premio más suculento que tengas.

Si todo este proceso lo has hecho bien, tu cachorro se quedará encantado en su pequeña guarida, ¡la jaula!

¿Es cruel el entrenamiento en jaula para los cachorros?

No, ¡en absoluto! 

A menudo, esta práctica es malinterpretada, pero cuando el proceso de integración del cachorro con la jaula se hace correctamente, no podemos encontrar en este sistema ni un solo punto negativo. Es, por lo tanto, una herramienta invaluable para el desarrollo de un cachorro. 

El entrenamiento en jaula durante el aprendizaje del cachorro para ir al baño, requiere de una gran dedicación por parte de su dueño, ya que debe de sacarlo constantemente Además, una vez que el cachorro está fuera, debe de jugar con él, animarle a que haga ejercicio o cualquier tipo de actividad que promueva un descanso posterior en la jaula.

El cachorro, no solo se beneficia de la continua presencia de su dueño, si no pronto entenderá el verdadero significado de la jaula, que no es otro que proporcionarle descanso, tranquilidad y seguridad, partes fundamentales en el desarrollo del cachorro.

Lógicamente, no vamos a cerrar la jaula de por vida, estamos entrenando al cachorro para que aprenda a contenerse y sepa distinguir entre los momentos de juego y los momentos de descanso, estamos trabajando profundamente en su desarrollo y equilibrio, que serán fundamentales a lo largo de su vida. 

El uso correcto de esta herramienta permite trabajar con la psicología natural del cachorro, reduciendo su estrés mientras aprende los comportamientos deseados.

De acuerdo con la HUMANE SOCIETY, con el uso adecuado de esta herramienta, tu perro hará de su jaula un lugar muy cómodo, muy tranquilo y muy seguro.

Cosas que NO debes hacer en el entrenamiento con jaula o transportín

Si vas a optar por este tipo de entrenamiento para que tu cachorro aprenda a hacer las necesidades en su sitio, debes de entender los horarios, si no vas a disponer del tiempo suficiente, no va a funcionar, opta por el entrenamiento del punto 2, educación con corral o parquecito para perros. También tienes la posibilidad de alternar ambos sistemas.

Estas son algunas de las cosas que NO debes hacer con el entrenamiento en jaula:

1- No fuerces al cachorro a entrar en la jaula o transportín. Sigue las pautas descritas en este artículo. 

2- No puedes usar la jaula si tu cachorro no se ha adaptado previamente. Hazlo bien, no tengas prisa. 

3- No excedas el tiempo recomendado dentro de la jaula o transportín.

4- No adquieras una jaula o un transportin demasiado pequeños o grandes. El cachorro debe poder darse la vuelta completamente, acostarse estirado y estar de pié sin problema.

5- No utilices la jaula como castigo. 

6- No dejes en su interior, juguetes peligrosos que pueda destrozar o tragar.

7- No uses camas o colchones que no sean cómodos para tu cachorro.

8- No te ausentes con el cachorro dentro de la jaula (usa el corral en estas ocasiones)

2- Como educar a un cachorro para ir al baño: con Corral o Parquecito para perros

–Nivel de dificultad para el cachorro: Medio

–Porcentaje de dificultad 0/100: 35%  

–Nota media: 6,5

–Dedicación por parte del propietario: Baja

Siempre vas a necesitar un corral o parquecito para perros durante su educación para ir al baño.

Aunque estés usando el sitema 1 Jaula o transportín, necesitaras el corral para los momentos en que te ausentes o si necesitas dormir toda la noche y no puedes estar pendiente de tu cachorro. Esta herramienta es esencial.

Si no dispones del tiempo necesario para el entrenamiento con jaula o transportín, el corral o parque para perros es una buena elección.

Este método puede ser un poco más lento en el proceso de educar a un cachorro a hacer sus necesidades en el lugar adecuado, pero es una excelente alternativa para aquellas personas que no disponen del mejor horario para atender a su mascota. 

El corral o parque para perros está diseñado principalmente como un área de recreo para los cachorros. Puede ser adaptado para incluir una cama, agua y un área designada para el empapador, todo organizado de manera adecuada.

Es importante no hacer el corral demasiado grande, ya que está comprobado que reducir el área facilita y acelera el proceso de aprendizaje del cachorro.

Si optas por este sistema, es porque no puedes sacar al cachorro con la frecuencia necesaria, como en el caso de usar una jaula o transportín. Por lo tanto, el cachorro debe tener acceso a lo esencial para satisfacer sus necesidades, como el empapador o papel de periódico, agua y una cama, todo fácilmente accesible.

No se recomienda dejar comida disponible todo el día durante el entrenamiento, ya que esto puede dificultar el control de los esfínteres. Lo ideal es ofrecer comida al cachorro tres veces al día a partir de los 2 meses de edad, al menos hasta los 6 meses, momento en que se puede cambiar a una dieta de mantenimiento con dos comidas al día en lugar de tres. Hablaremos de la dieta después, y de su importancia a la hora de educar a un cachorro para que vaya al baño.

Al comenzar a utilizar este sistema, las primeras semanas pueden resultar un tanto desafiantes, especialmente si tu cachorro es enérgico y necesita actividad. Es posible que el empapador o el papel utilizado sean destrozados en cuestión de momentos. 

A veces, al llegar a casa, te enfrentas a un escenario caótico: el empapador hecho pedazos, el agua derramada por el suelo y las deposiciones y el orín repartidos por todo el corral. Este desorden inicial puede dificultar el proceso, pero aún así, es una opción considerablemente mejor que dejar al cachorro suelto por toda la casa

Siempre que sea posible, es recomendable que el cachorro tenga tiempo para jugar fuera del parque, especialmente con actividades vigorosas. Juega con el, si logras que el cachorro entre al corral un poco cansado, será más probable que respete el empapador y el agua, manteniendo todo más ordenado.

Cuando existe un cierto nivel de organización, es mucho más fácil que el cachorro aprenda.

Mantén el parque siempre limpio. Si el cachorro orina en el suelo, límpialo bien para evitar olores. Si lo hace en el empapador y lo ves, prémialo; si no lo ves, no lo premies, ya que no entenderá la conexión.

Si el empapador está sucio de orina, déjalo un rato para que el cachorro lo huela y vuelva a usarlo. No retires un empapador si solo tiene una o dos pequeñas marcas de orina, ya que ayudan en el proceso.

Cuando estés en casa, deja al cachorro en el parque la mayor parte del tiempo y sácalo solo cuando haga sus necesidades en el empapador. Así te aseguras de que no las haga en cualquier rincón de la casa.

El entrenamiento con corral o  parquecito puede llevar 2 meses de tiempo o más, aunque algunos cachorros pueden asimilar estos conceptos antes.

Aumenta el tiempo fuera del corral a medida que el cachorro tenga más control. Ten un empapador extra fuera del parque por si acaso.

Recuerda, todo lo que hagas debe de ser de menos a mas, no funciona que tu cachorro haya acertado una vez dentro del parquecito o corral y luego lo tengas durante toda la tarde por la casa, este es un proceso gradual y antes de dar pasos en falso que pueden significar un retroceso, debes de brindarle tiempos cortos fuera del parquecito.

Cosas que debes hacer durante el entrenamiento con corral o parquecito

1- Proporciona a tu cachorro una cama cómoda. Intenta que sea lo más estable posible, que no se mueva con facilidad, ya que debido a la libertad de movimientos que tendrá tu cachorro, es muy posible que la pueda trasladar.

2- Mantén siempre ordenado y muy limpio su espacio. Si el cachorro orina fuera del empapador, límpialo muy bien para que no queden restos y no le huela.

3- Puedes dejar agua, pero no comida. El control del alimento es importantísimo cuando estamos educando a nuestro cachorro para hacer las necesidades en sus sitio.

4- No uses un corral o parquecito demasiado grande, que sea justo para la cama, el empapador o papel que vayas a usar y el agua.

5- Cambia el empapador cuando esté sucio, pero no si tiene una o dos pequeñas marcas de orín ya que esto nos ayudará para que lo use de nuevo.

6- Colócale en su cama, un pequeño peluche, un juegue, o bien algo que le guste morder y no sea peligroso. 

7- No uses juguetes que le inciten a un juego vigoroso, para evitar en la medida de lo posible que todo acabe desperdigado.

3- Como educar a un cachorro para ir al baño: Modelo Tradicional

Empapador o papel en casa (sin jaula, sin corral)

–Nivel de dificultad para el cachorro: Muy alto

–Porcentaje de dificultad 0/100: 80%  

–Nota media: 2

–Dedicación por parte del propietario: Muy baja

El modo tradicional para que el cachorro aprenda a ir al baño sigue siendo ampliamente utilizado hoy en día.

La mayoría de las personas recurren a este método debido a la falta de información y enfrentan serios problemas para enseñarle a su cachorro a hacer sus necesidades en el lugar correcto.

A menudo, los cachorros se acostumbran tanto a orinar y defecar en cualquier lugar de la casa que sus dueños se sienten desesperados.

Este es un problema muy serio que, lamentablemente, lleva a muchas personas a abandonar a sus perros o a trasladarlos a un refugio. Aunque es inaceptable abandonar a un perro, sucede con demasiada frecuencia.

Esto nos hace reflexionar sobre la importancia de no adquirir un cachorro si no estamos dispuestos a brindarle una educación básica. La educación del cachorro es tan esencial como las vacunas para su bienestar y el de la familia.

En el método tradicional, se espera que el cachorro encuentre el empapador o bien se lo traslade allí varias veces al día, mientras que el resto del tiempo tiene total libertad para hacer lo que quiera.

Es crucial comprender que otorgar esta libertad a un cachorro que no distingue entre lo correcto y lo incorrecto solo garantiza el fracaso.

Aunque algunos cachorros puedan haber sido entrenados previamente por los criadores o hayan vivido en un ambiente propicio para aprender, cuando llegan a su nuevo hogar, es como empezar de cero. Por lo tanto, educar a un cachorro para que haga sus necesidades en un lugar adecuado es una responsabilidad fundamental del dueño y requiere paciencia, consistencia y dedicación.

No recomendamos seguir este sistema porque carece de entrenamiento. Se espera mucho del cachorro con poca intervención humana, lo que, en términos de educación, resulta totalmente contradictorio. 

– Alternando los sistemas 1, 2 y 3 con la calle

Cualquiera de los tres sistemas puedes alternarlo con salidas a la calle, si bien el sistema numero 1 entrenamiento con jaula o transportín es el único que te garantiza el éxito mas inmediato.

Nunca dejes que tu cachorro pise el suelo de la calle hasta que tenga puestas las tres vacunas principales, si no tiene una buena protección, estará expuesto a enfermedades víricas muy peligrosas.

Si bien es verdad que la vacunación no garantiza al 100% que el cachorro no vaya a coger una enfermedad vírica, tener todas las vacunas puestas, podría atenuar los síntomas e incluso salvar la vida de tu cachorro, cuando hablamos de enfermedades potencialmente mortales como el parvo virus canino, que además, afecta principalmente a los cachorros.

Una vez que tu cachorro tiene ya las vacunas, podemos sacarle para que haga sus necesidades en la calle.

En el caso de el sistema 1 de entrenamiento con jaula o transportín, es muy sencillo, solo se trata de bajar a tu cachorro a la calle en los momentos en que sale de la jaula, en lugar de que lo haga en casa en el empapador, papel o bandeja que se suele usar.

La mayor ventaja que tiene el sacar a tu cachorro a la calle, es que ya se va familiarizando con el lugar ideal para hacer las necesidades.

Puedes alternar la calle con el empapador si no puedes sacarlo tantas veces durante el dia, en cualquier caso, es una muy buena alternativa.

A medida que tu cachorro crece y el control de los esfínteres es mayor, tu cachorro se ira habituando al mejor de los entornos, que es la calle.

Sistema 1 jaula o transportín y salidas a la calle

En el caso del sistema de entrenamiento con jaula o transportín es bastante sencillo. 

Debes de bajar a tu cachorro a la calle en los momentos en que sale de la jaula, en lugar de que lo haga en casa en el empapador, papel o bandeja que se suele usar.

La principal ventaja de llevar a tu perro afuera cuando le toca es que se va familiarizando con el lugar apropiado para hacer sus necesidades.

Si no puedes sacarlo a la calle cada vez que salga tu cachorro de la jaula, como requiere este sistema, puedes alternar entre llevarlo afuera unas veces y permitirle usar el empapador en otras. En cualquier caso, es una excelente opción.

Conforme tu cachorro se desarrolle, adquirirá un mayor control de sus esfínteres, lo que le permitirá contenerse por más tiempo. Poco a poco, tu cachorro se acostumbrá a hacer sus necesidades únicamente afuera, si así lo has establecido. 

Cuando quieras podrás usar el empapador en casa, días de mucho frío, lluvia etc, si así lo prefieres, ya que tu cachorro tendrá esta lección muy bien aprendida.

Sistema 2 corral o parquecito y salidas a la calle

Con el sistema 2 de entrenamiento con corral, las salidas a la calle no están tan organizadas en cuanto a los horarios como en el sistema 1.

Si bien el parquecito te brinda la posibilidad de educarlo para que vaya al baño, como no tienes un control exhaustivo de los horarios en los que hace sus necesidades, puede costarte un poco mas el hecho de que salgas a la calle y tu cachorro orine o defeque. Esto se debe a que existe la posibilidad de que lo haya hecho en el empapador unos minutos antes y ya no tenga ganas.

Es importante que le des tiempo a tu cachorro para asimilar el concepto, ya que está siendo educado para que haga sus necesidades cuando lo desee en el empapador. Sin embargo, a medida que se desarrolle y adquiera mayor capacidad para retener, lo lograrás.

Siempre podrás alternar entre el empapador y la calle, aunque inicialmente no podrás tener un control absoluto. Debes tener paciencia.

Sistema 3 Modelo tradicional y salidas a la calle

Con el método tradicional, enseñar a tu cachorro a hacer sus necesidades en la calle puede resultar muy difícil.

No todos los cachorros son iguales; algunos comprenden el concepto rápidamente y si tienes suerte en este aspecto, habrás avanzado mucho.

La razón por la que no se recomienda este enfoque, que en realidad no implica educación, es que existe una alta probabilidad de que el cachorro tarde mucho en aprender e incluso, en algunos casos, nunca lo llegue a aprender.

Abrirle por completo los espacios en casa es  complicado de gestionar, cuando se trata de enseñar a tu cachorro a ir al baño.

Si no tienes la posibilidad de seguir el sistema 1 o 2 de entrenamiento por alguna razón, la mejor recomendación que podemos ofrecerte es que saques a tu cachorro a la calle asiduamente, varias veces al día, cuantas más mejor, para que pueda asimilar cuanto antes un lugar para hacer sus necesidades, en lugar de cualquier rincón de la casa.

Si lo sacas con mucha frecuencia, cabe la posibilidad de que tu cachorro aprenda a medida que vaya creciendo y evolucionando.

El uso de empapadores

El empapador es una herramienta ideal para el adiestramiento debido a su alta higiene, la capacidad para retener el orín y la rápida sequedad que permite su reutilización. Esto es crucial, ya que el olor impregnado en el empapador ayuda al cachorro a asociarlo rápidamente como su lugar para ir al baño.

Es especialmente útil cuando no podemos sacar al perro a la calle debido a la falta de tiempo, mal clima u otras circunstancias.

Durante el proceso de aprendizaje del cachorro para ir al baño, su uso resulta fantástico ya que evita la necesidad de limpiar el suelo a fondo al no dejar residuos.

Es importante tener en cuenta que una de las capas del empapador es de plástico, por lo que se debe tener precaución en su uso dentro de corrales y parquecitos, especialmente con cachorros nerviosos que tienden a destrozar objetos.

Antes de dejar al cachorro a solas con el empapador, es recomendable verificar durante unos días si lo respeta o si tiende a destrozarlo.

En caso de comportamiento destructivo, se puede recurrir temporalmente al uso de papel de periódico, aunque es menos higiénico, puede evitar posibles ingestiones de plástico.

Muy Importante: El control de la dieta.

Controlar la dieta es crucial para el éxito del entrenamiento para ir al baño.

Muchas personas acostumbran dejar comida disponible todo el día para sus cachorros, lo que dificulta establecer horarios para un entrenamiento efectivo.

Es recomendable que el cachorro coma tres veces al día a partir de los dos meses de edad. Esto permite regular las digestiones y la consistencia de las heces.

Si el cachorro come en exceso, puede tener heces líquidas o pastosas y en gran cantidad, lo que dificulta el proceso de enseñanza, ya que no puede retener el alimento durante mucho tiempo. Enseñar al cachorro a ir al baño, es justamente lo contrario, implica enseñarle a retener, lo cual es complicado con un cachorro glotón que defeca constantemente.

Es importante evitar alimentar al cachorro muy tarde en la noche, ya que pasará varias horas en la jaula, el transportín o en su cama en el parquecito. Al menos dos horas antes de dormir, dale la última comida del día. De esta manera, el cachorro podrá comer, beber y hacer sus necesidades antes de dormir.

Recuerda que la calidad de las heces puede verse afectada por el tipo y la cantidad de alimento. Controla esto de cerca, ya que es vital para el éxito del entrenamiento.

Además, debes controlar la cantidad de premios que le das al cachorro. Demasiados premios pueden resultar en sobrealimentación, lo que afectará la calidad de las heces y, por ende, el éxito del entrenamiento.

Los premios deben ser pequeños y dados en cantidades moderadas. Si premias constantemente al cachorro, el valor del premio disminuye. Combina algunos premios con muestras de afecto y juegos, lo que no solo será apreciado por tu cachorro, sino que también mantendrá un equilibrio en su dieta y la calidad de las heces, elementos cruciales en el entrenamiento para ir al baño.

Por último, la calidad del alimento es muy importante para el control  y calidad de las heces. Vigila que el alimento que le das a tu cachorro le sienta bien, esto puedes verlo en la consistencia de las heces, así como en su desarrollo. No uses alimentos de baja calidad, procura alimentarle lo mejor posible.

Para tener un control más amplio sobre su educación a la hora de ir al baño, debemos de controlar también lo que come.

Momentos claves en que tu cachorro tendrá más ganas de ir al baño

Aunque tu cachorro podría sentir la necesidad de ir al baño en cualquier periodo del día, hay cuatro momentos clave en los que es más probable que lo haga.

Estar atento a estos momentos te ayudará a mantenerlo cerca del empapador u otra herramienta que utilices para este propósito.

1- Después de comer:

Es recomendable sincronizar los horarios de las comidas con los momentos en que sale de la jaula. 

Lo ideal es alimentarlo dentro de la jaula justo antes de sacarlo y, una vez que haya comido, llevarlo de inmediato al área donde se encuentra el empapador, periódico, bandeja u otro dispositivo que utilices.

2- Después del ejercicio o juegos:

Es común que los cachorros necesiten ir al baño poco después de jugar, ya que el movimiento estimula los intestinos. Si lo llevas al empapador después de sacarlo de la jaula y no hace nada, es posible que lo haga después de jugar contigo.

3- Después de beber:

Durante el entrenamiento para ir al baño, no se recomienda dejar agua dentro de la jaula o el transportín, a menos que haga mucho calor, ya que beber agua podría estimularlos a hacer sus necesidades en el interior. 

Dado que el cachorro pasará muchas horas fuera de la jaula durante el día, tendrá suficientes oportunidades para beber.

Además, los cachorros muy jóvenes tienden a ser curiosos y pueden derramar el agua, mojando la cama en la que duermen.

Poco después de comer y/o beber, suelen hacer sus necesidades.

4- Después de dormir:

Con frecuencia, los cachorros sienten la necesidad de ir al baño temprano en la mañana, especialmente después de dormir durante varias horas.

Deseamos que sigas esta guía y tengas mucho éxito con tu cachorro.

Cuéntanos tu experiencia en los comentarios.